Aunque son muy pocos los casos conocidos de perros y gatos con alguna discapacidad, cada vez más las personas están alertas de los cambios que experimentan las mascotas y también de sus respectivos cuidados, diagnósticos y el amor representado en algunas acciones que mejoraran su calidad de vida y ánimo.
Los cuidados son los siguientes:
Para las mascotas con discapacidad física es importante que la actividad no se detenga pero que sí disminuya su impacto para no causarle fatiga al perro o al gato y para evitar desgastar las articulaciones de las otras extremidades; es ideal que el hogar no tenga escaleras o evitar al máximo la interacción de la mascota con ellas; alejarlo de las superficies resbalosas para evitar caídas o lesiones y procurar que la silla de ruedas o las prótesis se usen por cortos periodos de tiempo, ya que puede producir lesiones en la piel o problemas musculares, articulares o de postura
Para las mascotas con discapacidad visual lo esencial es estimular el oído con sonidos agradables y que le permitan conocer nuestra ubicación. Hablarles incrementa la confianza y la seguridad; es importante no hacer cambios drásticos en la casa para que sea más fácil para el perro o el gato ubicar el alimento, la puerta, el parque, entre otros; es ideal crear rutas dentro del hogar que la mascota pueda seguir para evitar chocar con esquinas filosas, escaleras, paredes, muebles, entre otros y al momento de pasear, siempre deben ir sujetos a la correa y se les debe permitir olfatear para que este sentido les permita recordar los recorridos.
Para las mascotas con discapacidad auditiva es importante que el contacto físico y el olfativo permite que cree lazos de confianza y no se asuste; evitar los movimientos bruscos y nunca dejarlo suelto durante los paseos porque pueden ocurrir accidentes con automóviles y otros animales.
Para las mascotas con discapacidad vocal, aunque es la menos común de las discapacidades presentadas en perros y gatos, es importante conocer y entender los gestos que hacen las mascotas con las orejas, la mirada, la cola entre otras para saber qué nos quieren manifestar.